Tips para no empacharte en estas Navidades
Llegan las Navidades y, con ellas, las comilonas. Disfrutamos de los canapés, los guisos y los turrones pero después a menudo sufrimos sus consecuencias: acidez, hinchazón, pesadez, malestar, etc.
Descubre en este artículo algunos tips para no empacharte en estas Navidades. No se trata de pasar hambre o quedarnos sin el postre, sino de disfrutar de cada comida con algunos consejos inteligentes. Te los contamos a continuación.
Empieza con un vaso de agua
Uno de los problemas de las comidas navideñas es que suelen ser más tarde de lo normal. Cuando llega el momento de empezar, estamos hambrientos y nos cuesta mucho más controlarnos.
Para evitar comer de manera compulsiva, un truco sería tomar un vaso de agua media hora antes. Esto no solo llena un poco nuestro estómago y nos hace sentir menos hambre, sino que también ayuda a tener una mejor digestión.
Mastica bien cada bocado
Masticar bien es otra manera de evitar el empacho sin pasar hambre. De este modo facilitamos la digestión y adelantamos la sensación de saciedad.
Se dice que el hambre dura 20 minutos desde que empezamos a comer. Por lo tanto, si comemos más lentamente, nos sentiremos llenos con menos cantidad.
No mezcles demasiado
A menudo el problema no es solo comer demasiado, sino mezclar demasiados alimentos diferentes. Por ejemplo, combinar todo tipo de aperitivos, con carne, pescado, queso, legumbres y postre puede ser una bomba si no tenemos un estómago muy resistente.
En cambio, comer más cantidad o más grasas pero de un solo plato podría facilitar la digestión. Así que si te encuentras ante una mesa llena de opciones, elige las que más te gusten y mézclalas solo con verdura o ensalada.
Compensa en la comida siguiente
Ya hemos comido y no hemos podido evitar empacharnos un poco. Pero todavía hay una solución para no empeorar la situación: la siguiente comida.
En primer lugar, esperaremos a hacer la digestión antes de comer de nuevo. Después, a la hora de la siguiente comida, elegiremos alimentos más ligeros y digestivos. Si ha sido una gran comida, haremos una cena suave de ensalada, sopa o crema de verduras. Si ha sido cena, por la mañana podemos desayunar fruta o un batido verde.
No te llenes del todo
Es difícil porque seguro que ante nosotros tenemos una gran cantidad de delicias gastronómicas. Pero con un poco de fuerza de voluntad podemos intentar quedarnos en ese punto en el que ya estamos satisfechos pero no demasiado llenos. Cuando todavía podríamos tomar algún capricho más.
Si paramos a tiempo, la digestión será más rápida y ligera, y evitaremos así el empacho.
Termina con una infusión
Las infusiones son el colofón perfecto para una buena comilona navideña. Algunas plantas medicinales ayudan a digerir las grasas y a evitar los gases y la hinchazón, molestias habituales para muchas personas en estos momentos.
Algunas de las plantas más populares son la menta, el hinojo, el boldo o el diente de león . Y si el empacho está relacionado con una comida demasiado agitada o con discusiones sobre política, la melisa nos ayudará a calmar los nervios en el estómago.
Al día siguiente, agua con limón
Si nos acordamos de los excesos cometidos cuando ya es demasiado tarde, es decir, cuando ya tenemos molestias digestivas, todavía hay remedio. Un vaso de agua con el zumo de medio limón ayuda a equilibrar de nuevo nuestro cuerpo y a aliviar la pesadez. Y si la persona suele sufrir acidez, puede añadirle una pizca de bicarbonato de sodio.
Aprovecha estos tips para sobrevivir a las comidas de Navidad de manera saludable. Porque se puede disfrutar de todas las exquisiteces de una manera saludable sin esfuerzo.