Tips para aprovechar las vacaciones y reducir el estrés
Se acercan las vacaciones de Navidad, una oportunidad excelente para reducir el estrés que muchas personas sufren a final de año. La necesidad de unos días de descanso, la nostalgia del clima frío y el anhelo de buenos propósitos nos invitan a buscar estrategias para empezar el año de la mejor manera posible.
Descubre en este artículo los mejores tips para aprovechar estas vacaciones y reducir el estrés. ¡Porque el tiempo libre es un tesoro que no podemos desperdiciar!
Desconecta de verdad
Cuando estamos bajo una situación de estrés, ya sea laboral o personal, también tenemos una dependencia muy fuerte de eso mismo que nos angustia. No conseguimos dejar de pensar en ello durante el día e incluso nos roba el sueño por las noches.
Las vacaciones son el momento ideal para desconectar. Todo lo que no sea urgente, puede esperar unos días. Y, por lo demás, dejar de hablar de ese tema y dedicarnos a actividades que nos gusten será de gran ayuda.
Límpiate de contaminación electromagnética
Si vivimos conectados a las nuevas tecnologías es posible que también tengamos un exceso de contaminación electromagnética en nuestro organismo. Este tipo de radiaciones no se ven, pero están por todas partes y alteran nuestros sistema nervioso. Están relacionadas con estados de estrés, ansiedad, depresión y muchos otros problemas de salud.
Por tanto, si queremos relajarnos y mejorar nuestra salud física y mental, deberemos desconectar siempre que sea posible todos los aparatos que nos rodean: el wifi, el móvil, el ordenador, etc. Además, la manera de limpiarnos bien de esa contaminación consiste en refugiarnos en entornos naturales siempre que podamos. Caminar una hora diaria por la arena, la tierra o la hierba es una terapia muy efectiva para lograrlo.
No te sobrecargues de tareas
Con el ritmo diario se nos suelen acumular la cosas para hacer: compras, recados, arreglos en casa, trámites, visitas, compromisos, etc. Sin embargo, estas vacaciones no son tan largas y debemos priorizar lo que es realmente urgente. Si nos sobrecargamos con tareas pendientes, el estrés podría ser incluso peor que antes.
Prioriza el tiempo de calidad en familia
Estas breves vacaciones no son días para correr de un lado a otro intentando hacer muchas cosas. Es mejor que sean pocas actividades pero de calidad.
Pasar de no ver casi a la familia a llenar las 24 horas del día con ellos puede ser agobiante para algunas personas. Por eso, elige bien, en especial aquello que tenéis muchas ganas de hacer juntos.
Busca también tu espacio
Si llevamos unos meses un poco estresantes también necesitaremos tiempo para estar solos. Porque el estrés no es solo laboral, sino que puede ser fruto de situaciones personales o familiares.
Busca tu espacio, dedica tiempo a lo que más te gusta, no te exijas demasiado y disfruta de los días sin prisas.
Crea momentos únicos
¿Te has bañado alguna vez en la playa en invierno? ¿Te gustaría probar algún deporte extremo? ¿Te atreverías a viajar a un destino sorpresa? ¿Por qué no visitas a un gran amigo al que hace mucho tiempo que no ves? ¿Te imaginas preparar alguna gincana original para tus amigos o familiares? ¿Y escaparte a la montaña solo para hacer un muñeco de nieve memorable con los niños?
Atrévete a crear momentos únicos. Esos que te dejan una sensación que ni siquiera una fotografía o un video puede capturar.
¿Qué es lo que realmente te relaja?
Por último, solo tú sabes lo que te relaja. Hay quien se calma con una excursión o una sesión de yoga y hay quien necesita deporte intenso o salir a bailar. Algunos quieren estar un rato solos y otros no ven el momento de verse con sus amigos.
Por eso, no te comprometas con lo que no quieres hacer y da prioridad a lo que esperas desde agosto. Estos últimos días del año pasarán rápido y seguro que querrás empezar el nuevo año con optimismo.