Estos últimos años los hurones se han hecho con un lugar entre nuestras mascotas. Este cálido animal se ha unido a perros, gatos, hámsteres, conejos y otras mascotas haciéndose un hueco en nuestros hogares. Un ejemplar en edad adulta llega a medir de 40 a 45 cms. y su peso oscila alrededor de los 2 Kg.

Su gran actividad unas horas al día contrasta con las 20 horas que dedican a dormir diariamente; por eso se recomienda pasar una o dos horas cada día con él cuando esté despierto ya que será muy poco pero lo dedicará a explorarlo todo, cada rincón o agujero que vea en la casa. Así pues, deberemos tener en cuenta que hay sitios tales como los espacios entre los muebles, detrás de las secadoras, lavavajillas, hornos, etc. son muy peligrosos para ellos. De igual forma es recomendable cubrir los cables de la casa, cerrar las ventanas y quitar las plantas de su alcance.

Los hurones se adaptan muy bien a espacios pequeños (100x60x60 cm a ser posible), a condición de que se los deje salir y se interactúe con ellos al menos un par de horas diarias. Al diseñar su recinto es muy importante que el suelo sea firme y con base alta para evitar que saquen el sustrato o defequen fuera de la jaula. Cabe recordar que son animales muy inteligentes y aprenden a abrir puertas fácilmente así que fijaros que el cierre de la puerta sea bastante firme. Ahora, centrándonos en la disposición dentro de la jaula, lo primero que debería contener su jaula sería un área de higiene con su bandeja con lecho inoloro y libre de polvo dónde el hurón hará sus necesidades. También dejaremos un área de juegos, donde tendrá varios juguetes adaptados al hurón como pelotas con cascabeles dentro, recorrido de tubos… No nos olvidaremos de un área de descanso donde colocaremos una madriguera en forma de caja o tubo o una hamaca que serán preferiblemente de tela para evitar dañar al hurón. Por último, pero no menos importante, deberemos dejar un área de comida, que contará con un bebedero y comedero lleno de pienso seco para que coma cuando le apetezca ya que ellos saben administrarse y dosificarse.. Al igual que con el pienso siempre deben tener agua fresca a su disposición, en ambos casos en un recipiente de base ancha y bordes bajos para evitar que su inacabable curiosidad e inquietud termine con un vuelco de los recipientes de comida.

También es recomendable prevenir parásitos internos y externos con el uso de pipetas ya registradas para el uso en este animal y por ser un animal muy sensible al virus del Moquillo es muy importante vacunarlo contra esta enfermedad.

Finalmente quiero destacar la importancia de castrar a todos los hurones que estén destinados a ser mascotas. Los machos no castrados tienden a ser muy agresivos con otros hurones en época de celo y desprenden un olor muy fuerte. Las hembras no castradas tienen un fuerte olor en época de celo, y además continuarán en celo a no ser que se apareen. Éste celo puede durar meses y conducir a una anemia y consecuente la muerte del animal. Una vez castrados sólo debemos recordar que la piel de los hurones, produce aceites corporales, que son una causa del olor mencionado anteriormente. Al bañarlo eliminamos esos aceites y estimulamos la producción de más aceites por parte de la piel del hurón. Esto se traduce en que a más baños, más aceites producirá y más olor desprenderá nuestro hurón. Así que es recomendable bañar nuestro hurón una vez al mes, o cada dos, tres meses sin ningún tipo de problema.

Por último los oídos del hurón también pueden oler un poco cuando tienen un exceso de cera, así que deberemos efectuar regularmente una limpieza..

Ah! y cuidado con los hurones con la cabeza blanca (llamaradas, pandas, etc.) o a rayas ya que pueden ser portadores de un defecto congénito conocido como Síndrome de Waardenburg que es el causante, sobre todo, de una sordera parcial y de una deformidad craneal.

Por:
Ferran Solanes
Colaborador Dpto. Veterinaria