¿Cómo podemos actuar ante una gastroenteritis?
En estos meses del año en que se acerca el buen tiempo no es extraño que se multipliquen los casos de gastroenteritis o gripe estomacal. Las primeras señales de alerta suelen ser náuseas, vómitos y diarreas, y es importante saber cómo actuar para sobrellevarla lo mejor posible y evitar la deshidratación.
A continuación te explicamos en qué consiste la gastroenteritis y cómo podemos actuar cuando nos toque a nosotros o a uno de nuestros familiares, así como algunos consejos para prevenirla. ¡Sigue leyendo!
¿Qué es la gastroenteritis y cuál es su causa?
Para empezar, la gastroenteritis es una inflamación que afecta al tracto gastrointestinal. Las causas de esta enfermedad pueden ser muy variadas. La más común es un virus, aunque también puede ser ocasionada por bacterias o por haber consumido algún alimento en mal estado.
Por último, tampoco debemos descartar algunas gastroenteritis de origen nervioso, sobre todo en personas que viven una etapa de estrés. Sin embargo, sea cual sea la causa, los síntomas y el tratamiento son los mismos.
Síntomas frecuentes
Estos son los síntomas más frecuentes relacionados con la gastroenteritis:
- Náuseas y vómitos
- Diarrea
- Dolor estomacal que puede ir acompañado de calambres en la zona abdominal
- Pérdida de apetito
- Fiebre
- Dolor de cabeza y dolor muscular
- Sudoración
- Malestar general
¿Cuando acudir al médico?
En algunos casos se recomienda acudir al médico lo antes posible:
- Cuando es un paciente de riesgo (niños, mujeres embarazadas, personas mayores o enfermas, etc.)
- Cuando la persona no puede beber nada o si aparecen síntomas de deshidratación (boca seca, ojos hundidos, piel seca y fría, orinar menos, hipotensión arterial…)
- Si aparecen síntomas más complejos (sangre en heces, convulsiones, etc.)
Si requerimos seguimiento médico, el personal de enfermería se ocupará de asegurarnos una hidratación adecuada.
¿Cómo podemos actuar?
A continuación ofrecemos los consejos más importantes para tratar una gastroenteritis en adultos.
1. Beber agua a menudo y en poca cantidad
Lo más importante, para empezar, es mantenernos hidratados. Para ello, deberemos beber agua de manera continuada. Sin embargo, para que nuestro cuerpo no la rechace, lo haremos a pequeños sorbos cada 30 minutos, incluso a cucharaditas si es necesario.
A medida que podamos, iremos tomando otras bebidas como agua con limón y miel, zumos caseros sin pulpa, agua de coco o bebidas isotónicas. En cambio, no se recomiendan bebidas azucaradas.
2. Introducir alimentos suaves y astringentes
Cuando sintamos que podamos empezar a comer, lo haremos con alimentos de fácil digestión. Puede ser arroz, pollo o pescado a la plancha, patata y zanahoria cocida, tortilla bien hecha, manzana pelada y rallada, plátano, membrillo, pasta sin salsa de tomate, yogur natural o pan blanco.
3. Extremar los hábitos de higiene
Durante los días que nos dure la gastroenteritis deberemos extremar los hábitos de higiene, sobre todo para evitar que otras personas de nuestra familia se contagien. Lavarnos las manos a menudo será imprescindible.
4. Tomar probióticos
Tomar probióticos durante la crisis de gastroenteritis podría ayudar a reducir la duración de la enfermedad. Además, estos serán muy beneficiosos si, por el tipo de gastroenteritis, nos tocara tomar un antibiótico.
¿La podemos prevenir?
Por último, las medidas de higiene también nos ayudarán a prevenir el contagio de las gastroenteritis víricas y bacterianas. Y, para evitar los alimentos en mal estado, tendremos que prestar mucha atención a los que conservamos en la nevera y ponerles la fecha en caso de no consumirlos en el día.
Comer fuera de casa, sobre todo en puestos ambulantes, siempre presenta riesgos, y más todavía en los días de calor. Y, si vamos a viajar al extranjero, mucho cuidado incluso con el agua que bebemos.
La gastroenteritis suele pasarse como una enfermedad leve siempre y cuando sigamos las recomendaciones de beber líquidos mientras dure la crisis. En el caso de niños pequeños, que las sufren más a menudo que los adultos, recomendamos que haya un seguimiento médico en todo momento.